-FERTILIDAD MASCULINA

.Cuando el problema es el semen: Fértil ella,
¿fértil él?

La infertilidad es un problema que afecta a cerca de 800.000 parejas en España. A nivel mundial, las dificultades para concebir afectan al 15% de las parejas. En un 30% de los casos la infertilidad es masculina, en otro 30% femenina y en un 40% de las parejas las causas son mixtas. Las soluciones que ofrecen los expertos se adaptan a esta situación.



Los caminos de la reproducción asistida

El tratamiento de la infertilidad en los hombres depende de la magnitud del problema. El camino más fácil es hacer una inseminación artificial (IA), una técnica de reproducción asistida que se puede poner en marcha en los casos en los que no hay problemas severos de cantidad de espermatozoides en el semen.

Si la prueba de cantidad y calidad de los espermatozoides da malos resultados, entonces hay que pensar en la fecundación in vitro (FIV)

Todavía hay un camino más complicado, cuando el recuento de espermatozoides en el semen está muy por debajo de las cifras consideradas normales. Se trata de la inyección intracitoplasmática de espermatozoides, una técnica también conocida por sus siglas (ICSI), que consiste en inyectar un espermatozoide directamente al citoplasma del óvulo para de esta manera conseguir su fertilización.

Existen otras causas de infertilidad en los hombres que tienen un origen y un tratamiento más sencillo como son la infección del semen que se superaría con un tratamiento específico de antibióticos o la infección por SIDA o Hepatitis C, que ha sido un problema histórico que se ha conseguido solucionar en los últimos años.

Cada uno de estos tratamientos tendrá mayor o menor éxito en virtud de muchas circunstancias pero, de modo general y, según la bibliografía médica, la inseminación artificial tiene una efectividad de entre un 20% y un 23% por intento. En la fecundación in vitro y la inyección intracitoplasmática la tasa de éxito se eleva a entre un 45% y un 50% por cada intento.

¿Los hombres son ahora más infértiles?

Una de las causas que parece explicar el aumento de los problemas de fertilidad de los hombres es el detrimento de la calidad seminal, un hecho más frecuente en las sociedades desarrolladas. Las investigaciones muestran que, desde hace más de una década, existe un descenso en la calidad espermática del semen, tanto en la morfología y movilidad de los espermatozoides, como en la cantidad.

Una hipótesis que intenta explicar la caída de la fertilidad se basa en los llamados disruptores endocrinos que serían responsables de crear anomalías en la reproducción humana. Así, algunos plaguicidas, fungicidas, sustancias químicas industriales, productos sintéticos y algunos metales pesados podrían estar interfiriendo en el funcionamiento del sistema hormonal y suplantando a las hormonas naturales, bloqueando su acción o haciendo aumentar o disminuir sus niveles.

Sin embargo, otros estudios afirman que la mayoría de los hombres tienen una calidad seminal por encima de lo normal y que lo que verdaderamente afecta a la fertilidad es que hombres y mujeres se plantean tener descendencia a una edad mayor que hace un par de décadas. Está establecido que, a partir de los 37 o los 38 años en la mujer, se produce un declive evidente en la fertilidad, sin embargo, no está tan claro que al hombre le pase lo mismo y menos aún si se recurre a los tratamientos de Reproducción Asistida.